Descripción
Si pretendes mejorar la calidad de tu dieta, nunca te irá mal comiendo frutas. Por eso, si estás pensando en la mejor manera de maximizar el valor nutritivo de cada bocado que comes, deberías incluirlos como un alimento habitual. Además, añadirlos a tu alimentación no te va suponer ningún esfuerzo, porque te van a encantar y combinan con todo.
Alto contenido de fibra de los higos
Una porción de 60 g de higos secos contiene 5,9 g de fibra, el 23% de la que se necesita cada día.
La fibra que hay en los higos secos se reparte, casi a partes iguales, entre los dos tipos que existen, fibra soluble e insoluble. La fibra soluble retrasa la digestión, lo que tiene un efecto de control del apetito. También regula el azúcar en la sangre y ayuda a reducir los niveles de colesterol. Después, la fibra insoluble agrega volumen a las heces, lo que mejora la función intestinal.
Según se recoge en diversos estudios médicos, las mujeres adultas sanas necesitan 25 gramos de fibra al día, y los hombres adultos 38 gramos.
Aporte de hierro de los higos secos
Entre sus propiedades se encuentra la de satisfacer nuestras necesidades de este mineral. Así, una porción de 60 g de higos secos contiene 1,2 mg de hierro, el elemento esencial que sirve para transportar el oxígeno en la sangre.
Reducción de la presión arterial
Entre las propiedades de los higos secos obtenemos tres importantes electrólitos: calcio, magnesio y potasio. Todos ellos tienen numerosos papeles pero, como tales electrólitos, trabajan juntos para asegurar que los nervios y los músculos funcionen correctamente.
Por ejemplo, el potasio regula los latidos del corazón. El magnesio hace que los músculos se relajen. Y el calcio estimula la contracción muscular. Además, el potasio es especialmente importante por su capacidad para contrarrestar el impacto de tomar demasiado sodio. Con el significado que tiene utilizar una dieta baja en sodio, y alta en potasio, para prevenir la presión arterial alta.
Higos secos, huesos fuertes
Los higos secos contienen más calcio que la mayoría de las frutas. Así, una porción de 60 g de higos secos te va a proporcionar hasta 100 mg de este elemento. Y en este sentido, no deberías olvidar que una ingesta adecuada de calcio favorece la salud ósea, es necesaria para el crecimiento, y reduce el riesgo de desarrollar osteoporosis.
Las personas adultas necesitan entre 1.000 y 1.200 mg de calcio al día. Para ello, una porción de higos secos (60 g) nos entrega el 12% del valor diario indispensable. Incluso en una medida superior al de la misma cantidad de leche descremada.
Asegúrate de incluir una variedad de alimentos ricos en calcio en tu dieta. Y entre ellos, los higos desecados para satisfacer tus necesidades diarias de este mineral.
Como parte de una dieta sana y equilibrada, los higos también son nutritivos y proporcionan sus beneficios a partir de un conjunto de nutrientes esenciales. Entre ellos, cabe destacar su gran cantidad de vitaminas, por ejemplo: la vitamina B6, vitamina A, vitamina K, tiamina o el ácido pantoténico, entre otras.