Descripción
La soja texturizada tiene una buena cantidad de proteínas y nos sirve para un montón de cosas, sobre todo como sustituto de la carne. Viene deshidratada. Es decir, que los trocitos de las bolsas no contienen agua, pesan muy poco, y se pueden guardar durante mucho tiempo. Para hacerla más comestible hay que hidratarla, y para ello se puede hacer de dos formas:
Dejándola en remojo
Con la cocción del plato
Si la hidratamos dejándola en remojo con agua. En general necesita el doble de agua(en volumen), la absorberá y crecerá un montón.
Esta soja ya hidratada es mejor saltearla o dorarla con especias, ya que tiene poco sabor y está fría. Al cocinarla al sartén con un poco de aceite de oliva y condimentos absorbe esos sabores y adquiere mucha mejor textura.
Es una gran aliada ya que sustituye muy bien a la carne picada a la hora de hacer boloñesas, lasañas, pizzas, hamburguesas, etc.